(Artículo de: http://www.decoestilo.com)
Las paredes pueden dar vida a la más sosa de las casas. Una acertada elección del color de pintura y quizá una nueva forma de pintar con diferentes motivos o geometrías pueden hacer que la casa y todo lo que contiene parezca de diseño o bien darle un aire muy personal. Estas técnicas sencillas pueden ayudarte a crear el ambiente que buscas. Es importante manejar con soltura la cinta métrica, el nivel láser o de burbuja y la cinta de carrocero, pero poco más, ya que aplicar la pintura es casi un juego de niños…
Pintar a rayas
Pintar las paredes a rayas mediante la técnica de reservas es muy sencillo, aunque también laborioso. Se trata de medir la pared para observar cuántas franjas (horizontales o verticales) caben, pudiendo ser todas de la misma medida o siguiendo un determinado patrón de colores y anchos. En principio, lo más sencillo es pintar líneas verticales iguales en sólo dos tonos. Con cinta métrica determina el ancho de la franja y traza con lápiz una línea vertical (mide a diferentes alturas) con ayuda de un listón. Pega la cinta de carrocero en ambos lados de la franja y pinta con rodillo de espuma en el color elegido. Deja que se seque el color y quita sin demorarte la cinta de carrocero, ya que va cobrando cada vez más adherencia. Sitúa una nueva cinta y así vas pintando las rayas a dos colores con ayuda de un rodillo de espuma de la medida adecuada. No temas porque la cinta aplicada sobre la pintura seca no quita el color. Para agilizar la tarea utiliza una pintura plástica monocapa de buena calidad.
Pintar a mano alzada
Hay que tener alma de artista para hacerlo bien, por eso te recomiendo que busques primero un modelo que copiar. Puede ser una flor o una silueta de un tejido, quizá de unas cortinas o de una funda de edredón que quieras copiar… Lo mejor es hacerlo en un solo color. El resultado del plata sobre el tono violeta de la pared que ves en la foto, como ves, es espectacular. Necesitas pintura plástica poco aguada y un pincel de calidad. Si en algún momento te equivocas puedes corregir rápidamente con un paño humedecido o con un palillo de algodón.
Diseño gráfico en tus paredes
Nada puede aportar un aire más chic y urbano a tus paredes que expresar en ellas conceptos que te hagan sentir bien, como Relax, Fiesta, Zen, o cualquier otro que se te ocurra. Determina el tamaño al que lo quieres poner y busca una tipografía sencilla que te guste (en Internet encuentras decenas de ellas). Copia en un papel las letras que necesites y reprodúcelas sobre la pared con ayuda de la cinta métrica, la cinta de carrocero y el nivel de burbuja o láser… Te quedará espectacular.
Franjas de estarcidos
Decorar las paredes con estarcidos se trata de traspasar a la pared el dibujo de una plantilla en la que los huecos conforman una silueta. Quedan especialmente bonitos los motivos que pueden repetirse una y otra vez a modo de franjas o geometrías. Observa qué delicado queda este estarcido que parece una blonda blanca sobre la pared de color melocotón. Sólo necesitas comprar una plantilla o fabricar la tuya con una lámina de acetato (o una radiografía lavada), un dibujo que calcar y un cúter, y luego ir fijándola sobra la pared con cinta de carrocero para aplicar sobre los huecos pintura con un rodillo de espuma pequeño o, mejor aún, una brocha de estarcir, que son las que tienen las cerdas situadas en círculo y cortadas todas igual en su extremo a modo de borla. La pintura debe estar poco aguada y la plantilla bien sujeta para no salirte de los márgenes del estarcido. Puntea la pared a lápiz para que te queden alineados los dibujos a la misma distancia y siguiendo una franja imaginaria perfectamente horizontal.
Fotografías: Paint Quality Institute
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